La ozonoterapia está basada en el suministro de una determinada cantidad de ozono en el organismo mediante distintas técnicas. En algunas patologías ha permitido obtener unos resultados terapéuticos sorprendentes, gracias a su efecto:
- Acción directa – inmunomodulador
- Acción analgésica y miorrelajante
- Efecto antibacteriano y antiviral de tipo sistémico
- Reactivación de la circulación venosa y arterial
Aplicaciones médicas de la ozonoterapia
- Revitalizante
- Inmumodulador / Infecciones: el ozono es más útil en aquellas infecciones invulnerables a los antibióticos como son las víricas y los hongos. La hepatitis, el herpes, epsein-bar (mononucleosis infeccionsa).
DERMATOLOGÍA
- Herpes zóster y simple
- Acné
- Eczema
- Lipodistrofia (celulitis)
MEDICINA INTERNA
- Hepatitis
- Enfermedad de Crohn
NEFROLOGÍA
- Adyuvante en el tratamiento de las patologías isquémicas metabólicas.
NEUROLOGÍA
- Cefalea en racimos
- Depresión
- Enfermedades neurovasculares
REUMATOLOGÍA
- Hernia discal
- Reumatismo articular
- Lumbociática
ORTOPEDIA
- Gonartrosis
- Osteonecrosis
ANGIOLOGÍA-FLEBOLOGÍA
- Insuficiencia venosa
- Úlcera diabética
- Úlcera posflebítica
- Todas las formas de desarreglos circulatorios
- Periférico: cuando la sangre no puede llegar a los tejidos, como pasa por ejemplo con la claudicación intermitente o con la pierna de fumador. También en la enfermedad de Raynaud y en las migrañas.
- Cerebral: estados anteriores y posteriores a una embolia, enfermedades degenerativas del cerebro y esclerosis cerebral.
- Coronaria: vasos coronarios, angina de pecho, o después de un ataque al corazón.
GASTROINTESTINAL
- Disbiosis intestinal
- Colitis
- Dismetabolismos
- Intolerancias alimentarias
- Úlcera gástrica

FISIATRÍA
- Rehabilitación neuromotora
- Fibromialgia
CARDIOLOGÍA
- Isquemias
CIRUGÍA
- Pre y posintervenciones quirúrgicas
NEUMOLOGÍA
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
- Hipertensión pulmonar
Hay diferentes formas de llevar el oxígeno activado (ozono) al lugar necesario. Las más usuales son las siguientes:
Aplicación directa en la piel: por medio de una bolsa de plástico: gangrenas y quemaduras.
Inyección subcutánea (por debajo de la piel): celulitis.
Inyección intramuscular (en las nalgas): dolores reumáticos.
Pequeña autohemoterapia: se extrae al paciente una pequeña cantidad de sangre -normalmente unos 10 cc-, se ozonifica y se vuelve a inyectar inmediatamente vía intramuscular. Así se consigue una especie de auto-vacuna que proviene de las propias células. Es muy utilizada en los casos de cáncer.
Autohemoterapia mayor: conocida también como “depuración de la sangre”. Se extraen de 200-300 cc. de sangre que, después de ozonificarla, se vuelve a inyectar a la vena. Es la forma de aplicación más común en el caso de enfermedades graves como la artritis, el herpes, el cáncer y las enfermedades cardíacas.
Inyección endovenosa: tiene un efecto más potente que la autohemoterapia mayor, debe ser realizada muy despacio.
Insuflación del intestino (ozono rectal): es la forma más antigua de administración interna, pues empezó a practicarse en los años treinta. La mucosa intestinal absorbe el ozono y gran parte llega directamente al hígado y le ayuda en su función de desintoxicación. Es la vía de administración en el tratamiento de la colitis ulcerosa y otros trastornos intestinales.